Situación: a unos 70 km al este de Logroño, en la comarca de Alfaro.
Extensión: 473,60 hectáreas.
Entidad de gestión: Consejería de Sostenibilidad y Transición Ecológica
Web: www.larioja.org/sotosdealfaro
Este espacio natural incluye algunos de los escasos bosques de ribera con arbolado maduro que quedan en el tramo riojano del Ebro. Estos bosques fueron talados y aclarados históricamente, convirtiendo sus ricos suelos en preciados terrenos agrícolas. Lo que hoy nos queda es, por tanto, un valioso patrimonio natural.
Lo que nos ha llegado hasta hoy de los sotos del Ebro en Alfaro es sólo una pequeña parte de lo que hubo en la zona. Pese a su reducido tamaño los sotos constituyen enclaves muy valiosos que nos permiten imaginar cómo era la vida y el paisaje que se formaba en torno al río. Hoy en día los sotos mejor conservados se nos presentan como formaciones arbóreas densas con especies como el sauce blanco, el chopo negro, el álamo blanco y el fresno. Plantas arbustivas como rosas, zarzamoras y espinos albares o majuelos, pueblan este espacio. En las zonas de sombra, plantas trepadoras como enredaderas y clemátides.
Las zonas de transición acuática y terrestre son siempre ecosistemas biodiversos, pero además la ubicación de los sotos en una zona de clima semiárido hace que se conviertan un medio adecuado para la entrada de especies de climas más húmedos y norteños.
Entre la fauna vertebrada, el grupo de las aves es el que presenta una mayor riqueza y variedad. Nidificando encontramos el milano negro, el andarríos chico, el pico menor, el avión zapador, la curruca capirotada, el pájaro moscón y el escribano soteño entre otros. Además, el Ebro acoge a un amplio grupo de aves como cigüeñas, martinetes, garzas, cormoranes y anátidas, que usan las riberas en distintas épocas del año para alimentarse y descansar.
Con relación a otros vertebrados las riberas albergan especies de gran interés como el visón europeo, la nutria y el musgaño enano, entre los mamíferos; el galápago europeo y el sapo de espuelas, entre los reptiles y anfibios; y el barbo de Graells, la madrilla y el fraile, entre los peces.